Pedro Casado, joven sevillano, farmacéutico de profesión, buen aficionado a los toros, es el director de una aventura ilusionante en el muy necesitado sector de la prensa de contenido taurino: la revista Rehiletes, que ya tiene el primer número en la calle.
Le hemos entrevistado, porque es una muy buena noticia la aparición de un nuevo medio dedicado a la tauromaquia, hecho por aficionados y con una vocación de calidad y permanencia.
¿Qué es Rehiletes, cómo la definirías?
Rehiletes es un desafío a la sociedad actual en forma de revista. Es una publicación que nace con el objetivo de convertirse en una herramienta cultural y moderna con una marcada vía de actuación centrada, principalmente, en dos pilares: el primero, aunar a periodistas de primer nivel con jóvenes promesas de las letras, cuidando al máximo los textos que aparecen así como las ilustraciones y fotografías; y, en segundo lugar, la promoción de la cultura taurina en todas sus vertientes, desde la literatura a la música, pasando por el folklore y la historia, así como de otros aspectos tales como ciencia o festejo popular, sin descuidar otros apartados como el dedicado a entrevistas de personajes interesantes de nuestro mundo.
La primera frase de la revista es una pequeña broma: «No, Rehiletes no es una revista de costura» ¿puedes explicarla?
Es una buena pregunta; cuando en las primeras reuniones estábamos decidiendo aún qué nombre ponerle a la revista, apareció Rehiletes a la palestra y se descartó en un primer momento porque nos sonaba a eso, a algo relacionado con la costura y la moda. Tras mucho pensar, volvimos a él pues encajaba a la perfección con lo que buscábamos, un sustantivo taurino pero que no se usara habitualmente por considerarse demasiado “culto”. Al final, quedó la broma entre el equipo y decidimos hacer un guiño al inicio del primer número.
¿Cómo se forja la idea de crear una nueva revista taurina? ¿qué espacio quiere ocupar?
Nace de la inquietud de una serie de jóvenes que ven como otras publicaciones que actualmente consumen personas de su rango de edad tienen un éxito considerable y acercan al gran público a determinadas disciplinas (como fútbol, baloncesto o ciclismo) y que el mundo del toro no tiene algo así y del apoyo de LigaToros, empresa promotora de la idea.
El espacio que viene a ocupar es el de la revista de culto, entendiendo esto como una revista que sea de diseño, fácil de leer y que, especialmente, sea perdurable en el tiempo. Quiere implantarse como un objeto imperecedero en plena era del “usar y tirar”.
¿Quiénes son los principales colaboradores?
Este punto es importante. Desde el inicio quisimos, puesto que creímos importante que se diera sitio a la gente joven, mezclar firmas contrastadas con plumas incipientes, al igual que en el apartado fotográfico y artístico.
En el primer grupo, encontraremos firmas de la talla de Inmaculada León, Lorena Muñoz, Jaime Roch o Ismael del Prado a los que se suman nombres inéditos o incipientes como el de Gerard Mas, Daniel de la Morena, Carlos Grasa o Rafael Florido.
En el tema de ilustraciones también contamos con gente nueva, como es el caso de Ricardo Gil, nuestro ilustrador de portada, que es una de las grandes promesas sevillanas del mundo del arte. Otro caso parecido es Alonso Pardal en el tema de diseño de moda o nombres más importantes en el tema a nivel nacional como Gonzalo Llanes o Álvaro García. Lo mismo para la fotografía, con reportajes firmados por nombres de la talla de Tomás Muruaga o Alberto Díaz y de incipientes como Alicia Peñarrubia o Marta Ascarza.
Es una publicación exclusivamente en papel, no hay edición digital, ¿por qué?
Fieles al compromiso de promover y defender la tauromaquia en todas sus vertientes, desde LigaToros (que es la empresa promotora del proyecto), hemos decidido dar un paso más y, en pleno siglo XXI, en el que las publicaciones en papel de calidad están sufriendo un auténtico declive y con el compromiso de aunar las nuevas y mejores tecnologías con lo más provechoso de la tradición, hemos editado la revista únicamente en papel. Creemos que es importante ese compromiso con lo tradicional, recalcando de nuevo el concepto de imperecedero, es importante seguir apostando por esas publicaciones taurinas que a lo largo de la historia de la tauromaquia han hecho muchísimo por el mundo del toro.
¿Cuál será su periodicidad?
La revista tiene una periodicidad cuatrimestral. Este fue uno de los puntos que más estuvimos pensando, pues queríamos sacar más en un año, pero al final, para mantener los estándares de calidad que queremos en la publicación, la única forma para garantizarlo era espaciando los números cada cuatro meses.
¿Qué nos encontramos en el primer número?
Hay espacio para todo un poco. Vamos a encontrar desde entrevistas a personajes de la talla de Espartaco o José Rufino (el que fuera ganadero de Peñajara), pasando por artículos resúmenes a nivel general y ganadero del año 2022 para llegar a otros reportajes sobre historia, ciencia, festejo popular o incluso sobre la Escuela Taurina de Cataluña.
En Rehiletes, también hay espacio para la crítica mordaz y la sátira, por lo que el lector encontrará viñetas de este estilo.
Tú escribes en este primer número sobre Manuel Granero, y además has prologado un libro sobre él ¿qué es lo que te atrae especialmente de la figura de este torero, fallecido trágicamente en 1922 en plena juventud?
Es un personaje único dentro del mundo taurino y su historia. Estamos hablando que un chaval de veinte años (edad que tenía cuando Pocapena de Veragua le infiere la mortal cornada en Madrid) era un auténtico ídolo de masas en España. En el ámbito taurino, decir que le tocó liderar una de las etapas más difíciles de la tauromaquia, la inmediatamente posterior a la muerte del gran Gallito y que su tauromaquia, la considero como el primer acercamiento conjunto a las dos de los colosos de la edad dorada, José y Juan. Pero lo interesante viene también marcado por su figura fuera de los ruedos, pues era un torero que tocaba a la perfección el violín, que gustaba de la lectura y el arte y que se codeó con los personajes más importantes de la época, desde militares a personajes de la cultura hasta llegar incluso, a los Reyes Alfonso XIII y Victoria Eugenia.
El último punto que me hizo adentrarme más y más en su vida: que estaba un poco olvidado y relegado a un segundo plano.
La revista tiene fotos magníficas, un formato grande, con páginas agradables al tacto, un diseño atractivo. ¿Queréis que Rehiletes sea, también, un «objeto bello»?
Sí, es uno de los objetivos principales de la revista. Hemos cuidado mucho el diseño, queríamos que todo fuera muy visual y que fuera agradable tanto al tacto como a la vista. Queremos que sea un objeto de colección, es por ello que también las tiradas son limitadas en número de ejemplares.
¿Qué acogida está teniendo esta aventura?
Al principio, el mundillo nos miraba con cierto recelo. ¡A saber qué estáis inventando! O ¡os queréis cargar la tradición, esto no es fútbol! Nos han llegado a decir. Nada más lejos de la realidad, lo que queremos es acercar esa tradición a un lenguaje cercano y actual. Superadas esas primeras dudas, la respuesta está siendo bastante positiva, pues el boca a boca está haciendo mucho y cuando la gente tiene la revista, le gusta y no se la espera.
Aun así, nos sigue faltando un empujoncito para que el proyecto pueda ser viable en el tiempo. La mejor forma de apoyar es adquiriendo la revista.
¿Los temas de los siguientes números están ya definidos?
Sí, están ya definidos. Un aspecto importante es que las revistas tendrán un pequeño porcentaje de actualidad, pero estarán centradas en temas monográficos que las hagan un producto imperecedero (perdón por repetirme tanto, pero quiero recalcar esta idea) y de colección, cuidando al máximo la edición e impresión, en la que se contará con materiales de altísima calidad. Así, en este primer año de andadura, las tres revistas se centrarán en los temas siguientes: toreros centenarios (que es la que ya se puede adquirir en la actualidad), los niños prodigio en el toreo y las Plaza de Toros.
¿Cómo se puede adquirir, y cuál es su precio?
Rehiletes se puede conseguir ya a través de varias vías: la primera, y la que creo más interesante, es una suscripción en la web, con un precio de 49,50 euros al año (3 números con el envío incluido y libro de regalo sobre Manuel Granero del que hemos hablado anteriormente). En la web, también se puede adquirir de forma unitaria, 13€ la revista más 7€ de gastos de envío (www.tienda.ligatoros.es).
También estamos trabajando en diferentes puntos de distribución en España, para adquirir por 13 euros cada revista. Los puntos de venta físicos autorizados hasta la fecha de hoy, son tres en Sevilla (el Kiosko San Agustín, la Librería Verbo de la calle Sierpes y en Espacio Sacáis); uno en Madrid (en la mítica Librería Rodríguez); y en Colmenar Viejo (Librería El Mirador). Estamos trabajando para tenerla próximamente en ciudades como Valencia, Salamanca, Pamplona y Bilbao.
Eres también presidente del círculo taurino Puerta Carmona, en Sevilla ¿cuáles son sus actividades principales?
El Circulo Taurino Puerta Carmona es una asociación cultural creada en 2016 por jóvenes aficionados cuyas principales vías de actuación son la defensa y promoción de la cultura taurina y la de velar por la integridad del rito que creemos que representa la tauromaquia. Sus principales actividades, siguiendo estos principios, son principalmente las presentaciones de libros, organización de conferencias y debates culturales, visitas al campo, unos premios anuales al mejor toro y mejor faena del ciclo continuado de la feria de abril o encuentros con personalidades del mundo del toro en nuestros ya famosos “Arroces del Círculo”. También, tenemos un área social en el que intentamos realizar actividades de esta índole con la tauromaquia como trasfondo.
¿De dónde viene tu afición a la tauromaquia?
Pues a mí, me gusta decir que fue por generación espontánea. Es verdad que en Sevilla la tauromaquia, por tradición, goza de buena salud, por lo que a pesar de que en mi casa y las personas de mi entorno no eran aficionadas, sí que había ido a la Plaza en algún festejo menor o incluso alguna corrida de feria. Empecé a interesarme y a instruirme de forma propia, adquiriendo algunos libros y viendo los festejos que ponían en televisión.
El punto diferencial fue, sin lugar a dudas, las visitas continuadas que empecé a realizar al campo gracias a un compañero de colegio, nieto de José Rufino, que me abrió las puertas de su ganadería, Peñajara, y siempre me han tratado como a uno más. Ahí fue cuando me entró de verdad la afición que mantengo con ilusión hasta día de hoy. También tengo que agradecerles a mis padres la paciencia que tienen conmigo en la actualidad, pues mi casa ha pasado de no tener nada taurino, a albergar más de 1000 objetos entre libros, carteles, fotografías y demás artículos de colección (cualquier día, me echan jaja).
Elige el cartel soñado para ti, según tus propios gustos, tres toreros y la ganadería.
Te voy a dar dos, uno histórico y otro actual. El histórico serían toros de Miura para Joselito El Gallo, Manuel Granero y Manolete; el actual, toros de La Quinta para Morante de la Puebla, Emilio de Justo y Tomás Rufo.
